El pasado Martes 25 de Mayo se publicó en el D.O.G.V. una Resolución de la Conselleria de Infraestructuras firmada por el Director General de Obras Públicas, Ismael Ferrer. Se trata de la aprobación definitiva del Tramo 1 de la CV-91 que va desde la rotonda del Palmeral hasta la rotonda de entrada a Bigastro.
Fue presentado en rueda de prensa a bombo y platillo por el Concejal de Urbanismo como la solución ideal de conexión entre la A-7 y la CV-95 (que va hacia la Costa) a través de este nuevo tramo de la CV-91(hacia Guarmadar pasando por San Bartolomé). Al escucharlo parecía que va a ser una conexión perfecta sin ningún perjuicio para los vecinos de la zona de Molins y Correntías.
Quiero recordar que en un Pleno del Ayuntamiento de Orihuela, la Alcaldesa Mónica Lorente y el Concejal Antonio Rodríguez Barberá se comprometieron (y así consta en Acta) a no permitir ningún tramo de la CV-91 ni cualquier otra infraestructura que perjudique a los vecinos de Molins y Correntías, así como de ninguna partida rural de Orihuela.
En el año 2.002 se aprobó un proyecto de la CV-91 (que va hacia Guardamar y pasa por el Hospital de San Bartolomé) con un desdoblamiento y una mejora del actual trazado. En el año 2.006 la Conselleria retiró este proyecto y respondiendo a oscuros e inconfesables intereses sacó un nuevo proyecto de la CV-91 que baja hasta Vistabella pasando por Bigastro y volviendo a subir para llegar hasta San Bartolomé, aumentado la distancia y el coste económico del proyecto sólo para favorecer intereses en urbanizaciones en la zona de Tierras Nuevas (aprobada polémicamente en tiempos de Medina en plena ruptura del PP con apoyos poco explicados). Este proyectó al poco tiempo se retiró por las miles de alegaciones presentadas por ciudadanos, asociaciones y partidos políticos. Dichas alegaciones no han sido contestadas todavía.
En el año 2.007 la Conselleria sacó a licitación la redacción de un nuevo proyecto de CV-91 (hacia Guardamar pasando por San Bartolomé) con un coste de 500.000 €. Desde entonces estamos esperando la redacción de ese nuevo proyecto que se prometió amoldarse al del año 2.002 que está socialmente aceptado. Hasta hoy no ha salido nada.
En cambio, el señor Ismael Ferrer (Director General de Obras Públicas de Conselleria) se arruga ante las presiones de la empresa constructora de la CV-95 (hacia la costa) que le exigen una garantía de aumento de flujo de coches por la misma para que sea rentable, y se saca de la manga una carta y aprueba el tramo 1 de la CV-91 (hacia Guardamar pasando por San Bartolomé) del proyecto anulado del 2.006 sin contestar a las miles de alegaciones presentadas a ese mismo tramo. El pliego de condiciones de adjudicación especifica que la empresa no podrá exigir mejoras para la construcción y la Conselleria se ha bajado los pantalones.
Este tramo del señor Ismael Ferrer (persona que perjudica a Orihuela con este proyecto) enlaza la Rotonda del Palmeral con la rotonda de entrada a Bigastro con un nuevo trazado que circula a 8 metros de altura con 4 carriles destrozando toda la huerta de Correntías y parte de Molins. Este tramo sólo tiene la bastarda intención de aumentar la circulación de coches hacia la CV-95 en Bigastro sin importarle el enorme daño a la huerta de la zona afectada. Es un tramo innecesario porque Orihuela ya tiene su conexión con Bigastro con una vía parque a cota cero (a ras de suelo) sin destrozar la huerta y que se contempla en el proyecto de la CV-95 (hacia la costa).
El Grupo Municipal de Los Verdes de Orihuela solicita que la solución sea la construcción de una conexión en vía parque desde la Rotonda de Benferri de la A-7 hasta la entrada a Orihuela y desde aquí salgan una conexión para la CV-91 (hacia Guardamar pasando por San Bartolomé) que siga el trazado del año 2.002 y otra conexión para la CV-95 (hacia la costa) hacia Bigastro por al trazado original a cota cero a ras de suelo sin destrozar la huerta de Correntías y Molins. Esta solución permite además que los turistas puedan entrar a la ciudad de Orihuela a realizar sus visitas turísticas sin tener que desviarse del trazado que quiere aprobar la Conselleria que no tiene pies ni cabeza además de crear un enorme destrozo y perjuicio a la huerta de Orihuela.
Manuel Gallud Gilabert
Concejal
Grupo Municipal Los Verdes
Orihuela
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