En el Pleno de Septiembre de 2.008 el equipo de gobierno del PP, a propuesta de su concejal Manuel Abadía, aprobó la Ordenanza Reguladora de Aparcamiento (O.R.A.) para el municipio de Orihuela. Sólo contó con la falta de apoyo del Grupo Municipal de Los Verdes que se abstuvo en la votación a manera de actitud expectante ante los compromisos que allí adquirió, y así constan en el Acta de la Sesión, el concejal proponente que entre otras cosas se comprometió a:
1.- Crear una amplia zona de aparcamiento disuasorio gratuito en el recinto de Los Huertos.
1.- Crear una amplia zona de aparcamiento disuasorio gratuito en el recinto de Los Huertos.
2.- Puesta en marcha de una línea de autobuses urbanos no contaminantes, gratuitos o con un coste mínimo, que hiciera un recorrido turístico-monumental y comercial por toda la ciudad que facilitara a los visitantes y a los clientes del comercio poder aparcar y desplazarse libremente para hacer sus compras y visitar nuestro rico patrimonio.
3.- Crear numerosas zonas de aparcamiento gratuito para residentes y trabajadores de las zonas afectadas por la aplicación de la O.R.A. en solares adyacentes que el Ayuntamiento se encargaría de acondicionar.
4.- Avanzar hacia la peatonalización del Centro Histórico para conseguir un Centro Urbano Comercial Abierto con acceso a través de transporte urbano gratuito y no contaminante.
En el Pleno de Enero de 2.009 se debatieron las alegaciones presentadas por varios ciudadanos a la citada Ordenanza que fueron rechazadas con los votos de todos los partidos a excepción de Los Verdes que las defendieron como suyas y que fundamentalmente consistían en:
1.- Modificar la distribución de las zonas urbanas afectadas por la O.R.A. porque varias de ellas no pueden ser consideradas como zonas comerciales.
2.- Modificar la distribución de los aparcamientos en algunas zonas afectadas por la O.R.A. para evitar producir atascos circulatorios como ocurre en la calle Aragón y Obispo Rocamora, entre otras.
3.- Reservar aparcamientos para Residentes las 24 horas del día en las zonas afectadas por la O.R.A. y no sólo en horario fuera de aplicación de la Ordenanza.
4.- Unificar el coste económico de los diferentes tramos horarios en las tarifas aplicadas en la Ordenanza, para que no sea más cara la última media hora de la tabla aprobada.
5.- Establecer en la propia Ordenanza que cualquier modificación de la zona afectada por la misma tenga que ser aprobada en Pleno tal y como ordena la Ley de Bases de Régimen Local, y no como ha quedado que permite cualquier modificación a petición de la empresa y sólo con un Decreto de Alcaldía.
Pues bien, hoy más de seis meses después de aquellos compromisos iniciales del Sr. Abadía y sus compañeros del gobierno del PP, nos encontramos con el anuncio de la próxima puesta en marcha de la O.R.A. para este verano sin haber cumplido ninguno de sus compromisos:
- No tenemos zona de aparcamiento disuasorio conectado con el centro histórico y comercial a través de ninguna línea de transporte urbano. Por tanto, no se favorece la llegada a nuestra ciudad de turistas ni de clientes a nuestro sufrido y abandonado comercio local.
- No se han creado apenas zonas de aparcamiento gratuito para los residentes y trabajadores de las zonas afectadas por la O.R.A.
- No se ha hecho nada en el sentido de la peatonalización del Centro Histórico de la ciudad.
Todo lo señalado se va a ver preocupantemente agravado por la coincidencia de la puesta en marcha de múltiples obras de remodelación del casco urbano que va a hacer la vida imposible a todo aquel que intente encontrar una plaza de aparcamiento.
La presunta ubicación del mercadillo semanal de los martes en el recinto de Los Huertos sin una inmediata puesta en marcha del transporte urbano necesario con unas condiciones de gratuidad y frecuencia en su recorrido por todas las paradas puede crear un daño irremediable a unos comerciantes ya de por sí esquilmados por una descerebrada política comercial de una concejalía nefastamente asesorada.
Quizás haya llegado la hora de que muchos comerciantes se levanten para reivindicar unos pisoteados derechos que sus representantes no hayan sido capaces de velar con una auténtica vocación de servicio, sino de servirse para su mayor gloria personal. Al PP de Orihuela le preocupa el comercio de esta ciudad lo mismo que a Camps le preocupa el coste de sus trajes.
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